Una medida destinada a aumentar la participación de los votantes
La Ciudad de Nueva York podría cambiar sus elecciones municipales y de alcalde a los años pares, para que coincidan con las contiendas a nivel estatal y federal. La propuesta, que se presentará a los votantes este otoño, requeriría un cambio en la constitución estatal antes de que pueda entrar en vigor.
El propósito principal de la iniciativa es abordar la persistentemente baja participación en las elecciones locales. En todo Estados Unidos, la mayoría de las elecciones para ayuntamientos y juntas escolares se llevan a cabo en años impares, lo que a menudo resulta en una participación limitada de los votantes. Los proponentes argumentan que combinar las elecciones locales con contiendas presidenciales o de medio mandato atraería una mayor visibilidad y compromiso.
Apoyo y oposición
Los partidarios creen que las elecciones consolidadas atraen a un electorado más amplio y diverso, al tiempo que reducen los costos administrativos y simplifican la logística. Señalan que tener menos días de elecciones puede ahorrar dinero en personal, materiales e instalaciones, lo que hace que el proceso sea más eficiente.
Ejemplos de otras ciudades, como Las Vegas, sugieren que la participación puede aumentar significativamente cuando las elecciones locales se trasladan para que coincidan con elecciones más grandes. Los analistas también enfatizan que este cambio podría aumentar la presencia de votantes más jóvenes, minorías raciales y étnicas, y comunidades de clase trabajadora en la toma de decisiones locales.
Por otro lado, los críticos advierten que tener boletas más largas puede abrumar a los votantes, lo que podría llevar a que algunos se salten las contiendas locales. También les preocupa que los asuntos municipales puedan recibir menos atención al competir con las campañas a nivel estatal o nacional.
Una tendencia nacional en crecimiento
En los últimos años, casi 30 estados han introducido medidas para consolidar las fechas de las elecciones, y 12 ya han promulgado tales reformas. El debate en Nueva York destaca una tendencia nacional más amplia hacia la alineación de los calendarios electorales. A medida que continúan las discusiones, los legisladores deben equilibrar los beneficios de una mayor participación y la reducción de costos con los desafíos de mantener el enfoque en la gobernanza local.

