La administración Trump planea implementar tarifas desde el 1 de agosto
La administración del expresidente Donald Trump ha confirmado que enviará cartas informando a diversos países sobre nuevas tarifas que entrarán en vigor a partir del 1 de agosto. Según declaraciones recientes, algunas naciones ya habrían alcanzado acuerdos para evitar los aranceles más altos.
Un enfoque bilateral en lugar de acuerdos multilaterales
Estas medidas derivan de una orden ejecutiva emitida el 2 de abril, que impuso aranceles a una amplia gama de países. En ese entonces, Trump presentó los cambios como una medida de “liberación económica”.
La tarifa original alcanzaba niveles del 46% para ciertos productos, pero fue reducida temporalmente al 10% durante un período de 90 días. La administración indicó que estas tarifas volverán a sus niveles originales el 9 de julio, salvo acuerdos bilaterales.
Hasta la fecha, solo se han formalizado dos acuerdos: uno con el Reino Unido en junio y otro con Vietnam el 2 de julio. A pesar de que el objetivo era negociar múltiples acuerdos antes del 9 de julio, la administración ha dejado abierta la posibilidad de extender las negociaciones hasta el Día del Trabajo (Labor Day).
Posibles impactos económicos
Aunque las tarifas son anunciadas como medidas dirigidas a gobiernos extranjeros, en la práctica son impuestos pagados por empresas estadounidenses al importar bienes, lo que puede traducirse en aumentos de precios para los consumidores.
El acuerdo con Vietnam, por ejemplo, establece un arancel del 20%, una reducción con respecto al 46% anunciado en abril, pero muy superior al 3% promedio antes de 2017. Esto podría afectar el costo de productos comunes importados, como calzado, electrodomésticos y maquinaria.
El enfoque actual favorece acuerdos bilaterales rápidos sobre negociaciones multilaterales más prolongadas. Si bien puede ofrecer beneficios como la reducción de barreras comerciales extranjeras, también implica costos inmediatos para empresas y consumidores estadounidenses.

